Es curioso. Suele pasar que la mayoría de los usuarios de teléfonos móviles al final suelen reconocer terminar aburridos de tantos recursos y
herramientas en sus terminales móviles, aquellas que tan sólo hace unos años eran deseo de todos y marcaban la moda de la tecnología móvil más
chic.En este momento en el que la revolución de la telefonía y el marketing móvil parecen estar en auge, surge la necesidad
de “educar” de forma “interesada” a los usuarios para que estos se familiaricen con las novedades y ventajas que ofrece la telefonía móvil y donde no
podemos olvidar ni dejar pasar por alto la posibilidad de conectarse y acceder a intenet desde nuestros dispositivos móviles.Las operadoras y compañías
anunciantes saben perfectamente que cada uno de sus clientes responde a un perfil determinado que posee sus propias preferencias e intereses, y que
cada uno de ellos posee determinados y diversos hábitos que finalmente son tomados en cuenta para hacer más efectivas sus propias campañas
publicitarias.Por ello, es fácil deducir que entre estos diferentes perfiles habrá quienes consideren que los servicios de acceso a internet a
través del móvil son casi esenciales en su rutina diaria pero también seguirán existiendo quienes no dependen de ellos o simplemente pertenecen a la
clase práctica de los que siguen usando su teléfono móvil simplemente para comunicarse a través del servicio de voz de toda la vida.Pero…¿
que pasa si uno de estos “usuarios prácticos” cambia sus hábitos?Curiosamente hace poco pudimos realizar un experimento utilizando un teléfono
móvil que generalmente era usado para realizar y recibir llamadas de voz, y que casi nunca había sido utilizado para acceder a internet. ( No
revelaremos modelo ni compañía ).Nos dispusimos a utilizar su navegador para acceder a la red y poder navegar desde este dispositivo móvil.
Curiosamente a los escasos 5 minutos sonaba la melodía que nos avisaba de que habíamos recibido varios mensajes nuevos.Al consultar estos mensajes
descubríamos que su contenido estaba relacionado con diferentes ofertas de suscripción a servicios de contenidos online de la propia compañía
operadora.Nuestra pregunta era, si este mensaje o acción publicitaria se debía a una curiosa casualidad o sin embargo ¿podemos deducir que nuestros
operadores siguen nuestros pasos y esperan el momento más adecuado para hacernos llegar sus ofertas relacionadas con nuestras acciones y hábitos?.